Considerada como la primera mujer escritora profesional de la Edad Media. ¿Por qué quiero hablar de ella? Por dos razones, 1º porque es mujer y 2º porque vivió en la edad media.
Porque es MUJER, y aquí nos adentramos en mi Indeprofundis. En mi momento actual, estoy haciendo una revisión profunda de mi sexualidad femenina, de mí, como mujer, a partir de un problema físico en mi cuerpo, relacionado con este tema.
¿Cómo me relaciono yo con mi sexualidad?, ¿con mi feminidad?, ¿qué valores históricos en esta encarnación me han sido dado al respecto?, ¿qué valores "a-históricos" (en otras vidas anteriores), me han sido dados? (energías que quedan en el inconsciente colectivo en lenguaje psicólogico, y en lenguaje espiritual, en la memória akashica)?
No se trata de culpar a los "hombres" del pasado (otras vidas), no se trata de culpar a "mis padres", en esta encarnación actual, no se trata de culpar a "los políticos de turno" del pasado remoto, no tan remoto o actual.
Se trata de investigar, se trata de analizar, se trata de Reflexionar, se trata de HUMILDAD, se trata de PERDONAR, y PERDONARME, se trata de COMPRENDER y de poner límites sí, aceptando la responsabilidad de cada cual.
En mi periplo reencarnacional he sido hombre y mujer, según las lecciones que quise aprender y si en esta no soy perfecta y veo que me hago daño y hago daño, ¿qué será en las otras?
La Edad Media me atrae, "estuve viviendo en ella", hay algo que debo aprender de ella todavía..., a la edad media se la tilda de oscura, no lo discutiré, pero (¿acaso ésta que vivimos no lo es?, jajaja, lo dejamos para otro momento)..
Cierto que para los poderes eclesiásticos y monárquicos, de esa época "las mujeres", eran consideradas como "objeto" sexual, pecaminoso, "el diablo", o sólo para "dar hijos" , o "objeto o cosa" manipulada para conseguir (tierras, dinero), cuando eran casadas por los reyes para obtener Poder, o tontas sin remedio que habían de cuidar, los hombres claro, porque ellas eran débiles.
Ilustraciones del libro: "La ciudad de las damas":
Sin embargo, hubo mujeres que se expresaron y ayudaron a expresar a otras mujeres, y dejaron huella. Almas que en su viaje de aprendizaje acerca del amor, de la valentía, de la luz, de la humildad, del conocimiento y la alegría, encarnaron en la Tierra, como MUJER, (muchas sabemos fueron quemadas, ignoradas, violadas,) y otras tantas tuvieron también a su lado, "hombres" conscientes, iluminados, que comprendían el valor de lo femenino tanto en la mujer como en el hombre y las ayudaron a Expresarse.
Una de ellas, es "Christine de Pizan", de quien hablo hoy. Pero no quiero dejar de mencionar a otras muchas que hubo en el medioevo y que he citado en este blog (Hildegarde de Bingen, abadesa, visionaria, música, "las beguinas", mujeres, místicas, seglares, trabajadoras familiares de la época, poetas, que afirmaban que su "maestro Interno", estaba en su interior, y no conocían o no seguían las directrices de Papas o religiosos, y algunas de ellas..fueron quemadas...), Juana de Arco, etc.).
de su madre, que sólo la veia para aprender "sus labores".
Christine tuvo a su disposición en la corte, tutores privados en un ambiente humanista que invitaba a ello, rico en nuevas ideas y bajo redescubrimiento del amor por el conocimiento.
Christine fue una mujer docta, ilustrada y preparada. Hablaba italiano su lengua materna, además de latín y francés.
A los 15 años contrae matrimonio con un noble, notario del rey, del que enviudaría a los 25 años y con 3 hijos a su cargo, además de perder parte de su patrimonio, a causa de una mala pasada por un conocido. Christine tratará de recuperar el dinero perdido, y decide entonces escribir como forma de ganarse la vida.
Los primeros escritos de Christine son baladas amorosas, tema que cambiará con la muerte de su esposo. Centrándose entonces con temas de su propio dolor y la soledad que le ha producido su muerte. Con el paso de los años, Christine amplia el tema de sus obras, donde incluye aspectos filosóficos, políticos, mitológicos, de amor cortés y fue a partir de 1399 cuando comienza a escribir sobre los derechos de las mujeres, obras que hoy en día siguen sorprendiendo por su actualidad:
En 1399 escribe -Epístola del Dios del Amor-, donde rechaza a los falsos amores y amantes, quienes prometen y luego no dan. Al año siguiente, en 1400, escribe dos ensayos sobre el sentido del amor cortés: -Dechado de Poissy- y - Debate de los dos amantes-. En ellas se planteó el papel de la mujer en las composiciones poéticas y cómo éstas le afectaban.
Una de sus obras, mas importantes fue: "La ciudad de las Damas", -Le Livre de la Cité des dames-. Libro que escribió en 1405 y donde mejor refleja ese espíritu femenino humanista y lúcido. Escrito como un diálogo entre estudiante y maestro. Las figuras alegóricas de la Razón, la Justícia y la Rectitud conversan con Christine y la invitan a construir una ciudad para mujeres famosas del pasado y para mujeres virtuosas de todos los tiempos, en un mundo hecho para los hombres.
En él, clamó contra el sistema misógino y a favor de los derechos de las mujeres. En él da voz a las mujeres como ciudadanas, status exclusivos a los hombres, y crea una ciudad donde ellas, con las Tres virtudes, al igual que ellos, tienen espacios y toman sus decisiones. Christine comienza su obra así:
"Me preguntaba cuáles podrían ser las razones que llevan a tantos hombres, clérigos y laicos, a vituperar a las mujeres, criticándolas bien de palabra bien en escritos y tratados...
Yo, que he nacido mujer, me puse a examinar mi carácter...
Me propuse decidir en conciencia, si el testimonio reunido por tantos varones ilustres podría estar equivocado. Pero, por más que intentaba volver sobre ello, apurando las ideas como quien va mondando una fruta, no podía entender ni admitir como bien fundado el juicio de los hombres sobre la naturaleza y conducta de las mujeres..."
Preparaba los libros con la ayuda de copistas e iluminadores y los ofrecía al mecenazgo de príncipes y reyes.
Christine de Pizan fue la más conocida de las escritoras laicas de la etapa medieval, una mujer singular y extraordinaria. A través de su vivencia personal y desde ese momento de la historia, consiguió transmitir el sentir de las mujeres y el poder de su palabra. Es considerada también como una de las primeras feministas que se pronuncio a favor del derecho de las mujeres y los logros de las mujeres casadas.
Falleció en 1430 a los sesenta y seis años en el monasterio francés de Poissy al que se había retirado en 1411.
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BIBLIOGRAFIA:
1. Mujeres silenciadas en la Edad Media. Sandra Ferrer Valero. Excelente libro. (Amazón).
2. Régnir-Bohler, Danielle. La palabra de las mujeres. Voces literarias, voces místicas. En: Historia de las mujeres en Occidente. Barcelona, Círculo de lectores, 1994, v.2, cap. XIII. p. 472-538.
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