“Ya muy temprano, el ser humano me pareció–feo-;
El animal me parecía más bello, más puro”. Caballo en el paisaje, 1910
En 1880, nace Franz Moriz Wilhelm Marc, el 8 de febrero en Munich, morirá en 1916, en la 1ª G.M. como soldado voluntario.
Es el segundo hijo del pintor Wilhelm Marc y su esposa Sophie.
En casa recibe una educación religiosa de carácter protestante, y esa impronta hace que en su adolescencia tenga dudas de qué camino tomar, si el de la Teología o la Filología, pero se matricula como estudiante en la Facultad de Filosofía en la universidad de Munich; sin embargo, a partir del servicio militar en 1900, da un giro, y ve claramente que quiere ser pintor.
Se matricula en la Academia de Munich, recibiendo influencia de la pintura muniquesa del siglo XIX.
Viaja a Italia, Francia, donde conocerá a su primera esposa, así como también las obras de los impresionistas franceses.
En 1905, conoce al pintor francés Jean Bloé Niestlé, pintor “de animales”, éste animó a Marc a poner artísticamente en práctica su simpatía por los animales. A Niestlé, le interesaba más que la representación formal del animal, expresar , el sentimiento de éste, plasmar el “ser” del animal; intentar ponerse en el lugar del animal.
Esto fascinó a Marc. Por ejemplo de un cuadro de Niestlé, en el que pinta a 100 estorninos, uno cree oír el gorjeeo y el aleteo de los pájaros.. Y! ninguno se parece a otro! . Cada animal tiene su propia expresión.
El desarrollo pictórico de Marc va desde la pintura tradicional muniquesa, a la pintura expresionista, luego a la abstracta con influencia futurista y del color, (influenciado por Delaunay. Pero siempre el tema principal ERAN LOS ANIMALES, sólo en su etapa final, la forma queda desdibujada, los animales se deconstruyen en formas circulares o no aparecen y es el color y su fuerza, según su propia teoría del color y lo que ocurre socialmente, lo que plasmará en sus cuadros.
Cuadro muy querido por el pintor, de su primera etapa:
El gorrión muerto, 1905
(óleo sobre madera, 13 x 16,5 cm)
En 1910, marca un cambio en su vida. Vuelve la espalda a la pintura muniquesa, y empieza a trabar amistades de artistas que influenciarían su trayectoria. El conocimiento de los cuadros de van Gogh y Gauguin, le impresionaron mucho.
Marc empieza a estudiar los colores espectrales, intentando encontrar una solución cromática Subjetiva, como se refleja en CABALLO AZUL I, 1911:
(óleo sobre lienzo, 112,5 x 84,5 cm)
Estudió la teoría de los colores de Goethe.
Perro tendido en la nieve, 1910/11
La amistad con August Macke y Kandinsky fue importante. Con Kandinsky, compartían la importancia de lo "espiritual", en el arte, sin embargo Marc nunca teorizó acerca de él.
Pero como Kandinsky, también buscaba una escala cromática subjetiva, que pudiera plasmar su espiritualidad.
Fundó junto a Kandinsky, el Der Blaue Reiter (el Jinete azul), un grupo artístico de creadores que compartían en sus obras la expresión de emociones y sentimientos, mediante colores vivos. Ambos decían: "-Estamos a las puertas de una de las más grandes épocas que, hasta ahora, ha conocido la humanidad, la época del gran espíritu-".
Aunque efímero, el grupo transformó de 1911 a 1913 la trayectoria del expresionismo, una de las vanguardias más importantes del siglo XX. Organizaron dos exposiciones y publicaron su famoso Almanaque, un libro con escritos y pinturas de MARC, KANDINSKY, JAWLENSKY y MACKE entre otros.
"Hago una
observación subjetiva, en la que estoy de acuerdo que el
COLOR, desde el expresionismo, fue adquiriendo una dimensión, una nueva
visión, una nueva mirada en plasmar la realidad. Se plasma lo que SE SIENTE a
través del color, y éste, para cada pintor significa diferentes emociones. NO
hay un patrón estático, rígido, el azul significa pasión, y el amarillo
alegría, etc…, así como la forma o el objeto a expresar va deconstruyéndose…
hacia formas cada vez más subjetivas o abstractas ( el arte abstracto, el
futurismo, el orfismo, el cubismo…, ).
Y esto en sí, es la “nueva
espiritualidad”, frente a una “vieja o rígida espiritualidad”, valores que en
su lucha por expresarse, causarán muchos cambios a nivel social, sufrimiento vital (1ªGM), expresión de nuevos estilos artísticos en el pensamiento, en la economía y en otros campos..." En una ocasión un campesino le preguntó que porqué pintaba a los caballos "azules", a lo que Franz Marc,
respondió que: -él pintaba cuadros-.
Los pequeños caballos azules, 1911
(óleo sobre lienzo, 200x130cm)
Particularmente, la primera vez que ví este cuadro, me quedé absorbida por él, me encantó! Este azúl tan profundo, tan bien expresado el cuerpo, los músculos del caballo. La sencillez, de sus actos cotidianos, limpiarse, comer...
Franz Marc quería expresar el "alma", el "sentir de los animales", así tenía estas reflexiones:
"-Qué pobre, desalmada, es nuestra costumbre de colocar animales (en nuestros cuadros) en un paisaje, que pertenece a nuestros ojos, en lugar de sumergirnos en el alma del animal para averiguar su círculo de imágenes-".
Los colores de Franz Marc, eran el vehículo por el cual podía expresar los sentimientos de los animales, su alma.
Franz Marc dijo: "Azul es el principio masculino, rudo y espiritual... Amarillo es el sol: El principio femenino, suave, alegre y sensual. Rojo era la tierra: -"!Brutal y pesada y el color que, constantemente, tiene que ser atacado y superado por los otros dos!"
Era el año 1911, ahora los colores despertaban a la vida en los cuadros de Marc. Se les oía respirar, temblar y manar.
Vaca amarilla, 1912
(óleo sobre lienzo, 140 x 190)
Los pequeños caballos amarillos,1912
(Óleo sobre lienzo, 66 x 104,5 cm)
Me encanta este cuadro, estos caballos amarillos,
siento una fuerza en esa paleta amarilla, en esa expresión de color plano. Y siento la fuerza del animal, su esencia robusta, libre, salvaje!
Franz Marc, decía al respecto de pintar animales:
¿Cómo ve el mundo un caballo o un águila, un corzo o un perro?
Qué pobre!, qué falta de alma es nuestra convención de situar animales en un paisaje que pertenece a nuestro ojos, en lugar de sumergirnos en el alma del animal, para descubrir su horizonte!.
Y sigue diciendo: ¿Qué tiene que ver el corzo con la imagen del mundo que nosotros vemos?
Tiene algún sentido racional o incluso artístico pintar el corzo como aparece a nuestra retina o de forma cubista, porque nosotros sentimos el mundo de manera cubista?
Quién me dice a mí que el corzo ve el mundo de manera cubista; lo siente como corzo, por lo tanto el paisaje tiene que ser corzo.
Yo puedo pintar un cuadro: el corzo. Pisanello los ha pintado. Pero yo también puedo pintar un cuadro: -el corzo siente-.
Qué sentidos infinitamente más finos tiene que tener un pintor para pintar esto!
En 1912/13, recoge
estos apuntes privados, algunas tesis sobre el arte abstracto y sobre los
límites del arte.
En torno al animal:
“Nosotros ya no
volveremos a pintar el bosque o el caballo como nos gustan o nos parecen, “sino
cómo realmente son”, como el bosque o como el caballo sienten, su esencia
absoluta que vive detrás de las apariencias que vemos”.
Una vez más me encuentro en los libros de arte con las (categorizaciones absolutas), es decir, cómo el crítico expresa categóricamente: -la imposibilidad de ponerse en el lugar de un ser de otra especie- y lo justifica alegando testimonios contemporáneos de Marc (amigos pintores). Pues afirma que lo que hace el ser humano, és humanizar al animal.
Zorros, 1913
PERO ESTOY EN DESACUERDO CON LA CATEGORIZACION absoluta.
¿Quién me dice que es imposible para un ser humano ponerse en el lugar de otra especie?
En el siglo X, se creía que la tierra era plana, así categorizaban los eclesiásticos, so pena de ir a la hoguera...
CUANDO SABEMOS que en el s. XV, se descubrió y por experiencia, que no lo era….
Hay maneras diferentes de decir las cosas. Una sería: yo no creo que un ser humano pueda sentir como un cierto animal o se pueda poner en su lugar….
Pero de ahí a decir que el ser humano no puede nunca…. HAY UN LARGO TRECHO, muchas puertas por abrir y descubrir….
En 1913, Franz Marc estaba fascinado por el pensamiento de que los rayos pasaran a través de los cuerpos sólidos. Franz hacía orejas como triángulos, ojos como rombos.
Los animales en los cuadros de Marc habían comenzado a desintegrarse. Los zorros rojos se desmoronaban en cristales, los corzos se fundían con los colores del mundo.
Todo estaba atravesado por la luz: como por rayos X, descubierto por entonces.
Los descubrimientos e inventos de la ciencia y de la técnica habían forjado, en pocos años, una nueva imagen del mundo. A la mayoría de la gente esta pintura no les gustaba, les ponía furiosa. No soportaban vacas en discos y tubos. Cuando, en realidad, Franz solamente pintó la verdad de la naturaleza de una forma moderna: Que toda la vida está formada por la misma materia, de las mismas sustancias químicas. A la gente, esto le daba miedo. Pero Franz dijo: "Todo es uno" . Pintó por ejemplo dos corzos que pasan del uno al otro como espectros. Gacelas que flotan, inundadas de luz y color. O pájaros como de cristal pulido. Con sus golpes de alas, hacían que aletearan y volaran todos los colores del mundo. Establos, 1913
(óleo sobre lienzo, 73,6 x 157,5 cm)
La Torre de los caballos azules, 1913
Franz Marc, escribió en el "Almanaque", del Der Blauer Reiter, sus tesis, que continuan teniendo vigencia en estos días. En el primer texto, -Geistige Güter- (Bienes espirituales), comprobaba que si, bien la humanidad se alegra sobre la conquista de nuevas colonias o sobre nuevos logros técnicos, nunca lo hace al conquistar bienes espirituales, pensando aquí principalmente en el nuevo arte. Lamentaba "la general falta de interés de los hombres por los bienes espirituales", terminando con una frase que sigue teniendo vigencia hoy en día: " Las nuevas ideas son difíciles de entender sólo por desa acostumbradas..."
En otra tesis, exponia que el mundo se encontraba en un estado de ánimo similar a la época de la cristianización. El arte actual sigue formándose sin relación con el público "podría decirse que a pesar de su tiempo". Estos cuadros son "signos originales, fogosos, de una nueva época, que ahora se reproducen por doquier. Lo que hoy parece fantasmagórico, mañana será natural".
Tigre, 1912
(óleo sobre lienzo, 111 x 111,5 cm)
Caballo soñando, 1913.
Pájaros, 1914
(óleo sobre lienzo, 109,5 x 99,5 cm)
En 1914, había empezado a pintar cuadros abstractos. El animal había perdido para él, el significado que antes tuviera.
Destino de los animales(los árboles mostraron sus anillos, los animales sus venas), 1913
Franz Marc, anotó en el dorso de este cuadro ( Destino de los animales), "Y todo el ser es sufrimiento en llamas".
Marc mismo escribió a María en 1915, cuando le llegó una tarjeta artística de Koehler de este cuadro: -Es como un barrunto de esta guerra, espeluznante y conmovedor; !no puedo creer que he sido yo quien lo ha pintado! En la difusa fotografía causa la impresión de ser incomprensiblemente verdadero, tanto que me sentí sobrecogido"
(óleo sobre lienzo, 135,7 x 144,5 cm)
Corzos en el bosque II, 1914
En una carta a María Marc (su esposa), de 1915 dice:
"Y del animal me separó un instinto hacia lo abstracto, que me excitaba aún más…Ya pronto, el ser humano me pareció feo; el animal me parecía más bello, más puero; pero también descubrí tantas cosas que se oponían al sentimiento, tantas cosas feas, que mis representaciones, instintivamente,… se hicieron cada vez más esquemáticas, más abstractas".
(óleo sobre lienzo, 112 x 84,5 cm)
En el año 1913, un año antes de la 1ª Guerra Mundial, quizás como presagio, Franz dijo:
"Qué bello, qué extraordinariamente consolador es saber que el espíritu no puede morir, bajo ningún suplicio, bajo ninguna difamación, en ningún desorden. Saber esto, hace más fácil marcharse".
El 1 de agosto de 1914, el Imperio Alemán declaró la guerra a Rúsia, dando la orden de movilización general. Franz Marc y August Macke se presentaron voluntarios. Fueron arrebatados por la fuerza idealista que justificaba esa guerra. August Macke, murió antes que Franz Marc, y pese a ello continuaba creyendo en la guerra, pues veía en ella, una forma de "purificación de la humanidad". La idea de que habían intereses económicos por medio, no lo aceptaba.
Sin embargo, en 1916, por las cartas que enviaba a su mujer, María, Marc, da un giro y le escribe en Año Nuevo:
"El mundo se ha enriquecido con el año más sangriento de su existencia de muchos milenios. Es horrible pensar en ello; y todo por nada, por un malentendido, por la falta de entendimiento humano"...
A comienzos del 1916, Marc tenía la esperanza de regresar pronto a casa. En una carta del 4 de marzo a María, se lo diría. Esa misma tarde, Franz Marc, fue alcanzado durante una patrulla de reconocimiento.
Formas luchando, 1914
(óleo sobre lienzo, 91 x 131 cm)
No sabemos si Franz Marc, hubiera sobrevivido, qué dirección hubiera tomado su pintura.
Cuando pienso en Franz Marc, siempre me viene a mi memoria, el AZUL de los caballos, ese azul profundo, la fuerza natural que emana; la ternura y dulzura del ROJO en el rostro del zorro, la felicidad AMARILLA de la vaca, casí un éxtasis, la paz BLANCA y AMARILLENTA del perro durmiendo...
Los zorros deconstruídos en forma de prisma, y el cuadro de palomas de colores, alza el vuelo en formas rectangulares.
Círculos de corzos.
LOS COLORES, fuerza de vida!,
hálito espiritual!
fuente de amor y fuerza
Alimento.
Impulso vital,
en el continuum de la vida,
en el descubrimiento de nuevas formas, nuevos saberes
nuevas alegrías!
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BIBLIOGRAFIA:
- MARC, Susanna Partsch. Edit. TASCHEN, 2005.
- FRANZ MARC. Los potros azules. Thomas David. Ed. Joven Arte, 1997.
Un pintor muy poco conocido por el gran público, sin embargo sus cuadros subyugan. Fue una lástima que muriera pronto.
ResponderEliminarGracias!
Un visionario, por el tema de "los animales sienten emoción" o SIENTEN!
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